Antes de que se terminara el nuevo coro gótico tardío, había una capilla debajo de cada una de las dos torres del gallo. El nombre de las torres se remonta al siglo XIV y procede de las dos veletas doradas situadas en lo alto de las torres.
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Las dos capillas más antiguas de la catedral
Las dos capillas tienen una estructura similar. Sin embargo, difieren mucho entre sí por su ornamentación. Mientras que la Capilla de la Magdalena incorpora la ornamentación de la catedral románica que ocupaba su lugar antes de las reformas del alto gótico, la Capilla de San Nicolás tiene su propio y rico programa decorativo de capiteles figurativos y cornisas.
Tras la ruptura del muro del ábside de las capillas en 1507, éstas fueron despojadas de su antigua función y convertidas en un pasadizo desde el crucero hasta la nave del coro. Tras la desacralización de la capilla románica de la Magdalena, la patrona de María Magdalena fue trasladada a su capilla en 1512 a petición del fundador Johannes von Blumeneck.
Relieves de la capilla de San Nicolás
Los relieves de la Capilla de San Nicolás (alrededor de 1210) son uno de los adornos figurativos más antiguos de la catedral.
Santiago el Mayor
En el muro norte de la antigua capilla se puede ver a un hombre sentado en un trono que corona a un niño arrodillado: se trata de un peregrino con una bolsa y bastón de peregrino, recibido por el apóstol Santiago el Mayor.
Relieves en el portal de entrada
Los relieves de la antigua entrada de la capilla saludan ahora a los visitantes en la entrada de las capillas del coro y del deambulatorio del coro.
Alejandro Magno
El capitel sur del portal (a la izquierda de la salida) muestra el vuelo del grifo de Alejandro Magno. Según la leyenda, fue elevado hacia el cielo en una cesta por dos grifos, atrayéndolos con dos liebres atravesadas en lanzas.
La Escuela del Lobo
A la izquierda de la escena con Alejandro Magno, en el interior del arco del portal, se representa la Escuela del Lobo, basada en una fábula animal muy popular en el siglo XI. Un monje a la izquierda intenta sin éxito enseñar a leer y escribir a un cachorro de lobo vestido con hábito monástico a leer y escribir, como se muestra con el "ABC" justo encima. Al alumno lobo, sin embargo, solo le interesa la presa, representada por un carnero.
El rey David y el león
En el extremo derecho de la cornisa vemos a un hombre sentado sobre un león, que abre la boca. Detrás de él aparece una cabeza de oveja. Esta representación se interpreta como una escena de la vida del rey David y su predecesor Saúl. El joven David quiere disipar las preocupaciones del rey Saúl ante la inminente batalla entre David y Goliat. El poderoso dominio sobre el león en el relieve remite a la tradición bíblica según la cual el pastor David persiguió a los leones y lobos que le habían robado las ovejas y arrebató de sus fauces las ovejas perdidas. Con la misma fuerza, según la convicción plasmada en la imagen, Dios salvará también al joven David de Goliat.
Familia de sirenas y batallas de demonios
En el capitel izquierdo con la familia de sirenas, una sirena cuida amorosamente al niño en sus brazos. El friso adyacente muestra dos combates contra demonios: a la izquierda, un hombre armado con espada y escudo ataca a un poderoso grifo; a la derecha, se encuentran dos centauros alados en un duelo.
